
Tal y como demuestran los estudios en especies actuales, la morfología de la estructura de la cáscara está estrechamente relacionada con las propiedades fisiológicas del huevo. En concreto, la porosidad, el grosor de la cáscara y el tamaño y forma del huevo se relacionan estrechamente con las condiciones abióticas y bióticas a las que está adaptado el huevo a incubarse. Si bien las tres últimas características ya habían sido examinadas en trabajos anteriores, ahora le toca el turno a la porosidad y la conductancia de vapor, que se han usado tradicionalmente para inferir aspectos paleobiológicos y paleoecológicos de los huevos de animales extintos. Así, la reconstrucción de los sistemas de poros mediante microtomografía y la medida y cálculo de la densidad de poros y la conductancia de vapor en los tres ootaxones identificados en la Formación Villalba de la Sierra aportan nuevos datos que apoyan las interpretaciones previas que se habían hecho sobre su paleoecología y paleobiología, que sugerían que cada uno de ellos estaba adaptado a desarrollarse en distintas condiciones microclimáticas.
De entre el material recuperado del yacimiento de Poyos (Guadalajara), los huevos de Fusioolithus baghensis muestran una mayor densidad de poros y conductancia que los hallados en otros yacimientos, como Auca Mahuevo (Neuquén, Argentina), a pesar de tener huevos de mayor tamaño con cáscaras más delgadas, sugiriendo que en Poyos estaban adaptados a condiciones más secas pero no tan cálidas como a las que se enfrentaban otros ejemplares de la ooespecie. Los huevos del nuevo ootaxón descrito en Poyos, Litosoolithus poyosi, con su mayor tamaño, menor grosor de cáscara y mucha menor porosidad y conductancia representarían un caso más extremo y estarían adaptados a condiciones aún más cálidas y secas que en las que se desarrollaban los huevos de Fusioolithus baghensis de Poyos. Finalmente, y en el otro extremo, encontraríamos los ejemplares de Megaloolithus siruguei del yacimiento de Portilla (Cuenca), que presentan un grosor y porosidad mucho mayores que los ootaxones de Poyos, con una mayor densidad de poros y conductancia con una gran variabilidad de grosor, pero menor que en la mayoría de yacimientos de otras Formaciones en las que se encuentra la ooespecie, como Pinyes (Lleida). En el caso de Megaloolithus siruguei, estos datos coinciden con que ya se había propuesto que pudiera estar adaptado a condiciones húmedas, pues presenta una red de canales secundarios que conectan lateralmente los canales de poros primarios. Esta estructura se había propuesto como una adaptación para la redistribución de los gases cuando algunos poros quedan obstruidos al depositar el huevo en sedimentos saturados de agua. El resumen es el siguiente:
Studies on extant species have proven that the morphological structure of the eggshell is strongly related to the physiological properties of eggs. Porosity, eggshell thickness and size and shape of the egg are strongly related to the abiotic and biotic conditions during incubation. Therefore, due to the crucial role of the eggshell in gas exchange, water vapor conductance (GH2O) has been used to infer palaeobiological and palaeoecological aspects of extinct animals. The reconstruction of the pore system through microtomography and the measurement and calculation of the pore density and GH2O supports previous interpretations for the three ootaxa identified in the Villalba de la Sierra Fm. suggesting that each adapted to develop under different nesting conditions. Fusioolithus baghensis eggs and eggshells from the Poyos fossil site (Guadalajara, Spain) show higher pore density (186 pores/cm3) and GH2O (3137 mgH2O/day·Torr) than those reported from Auca Mahuevo (Neuquén, Argentina), despite the former having larger eggs with thinner eggshells. This suggests that the specimens from Poyos are adapted to develop in drier but not as hot conditions than other Fusioolithus baghensis. Eggshells from a new fusioolithid from Poyos display considerably lower pore density (186 pores/cm3) and GH2O (785 mgH2O/day·Torr), with thinner eggshells and larger eggs, suggesting that it may have been adapted to develop in hotter and even drier conditions. Finally, Megaloolithus siruguei eggshells from the Portilla fossil site (Cuenca, Spain) display higher pore density (707 pores/cm3) and GH2O (4386 mgH2O/day·Torr), but thinner eggshells than those from other sites, such as Pinyes (Lleida, Spain). Additionally, this ootaxon is characterized by the presence of secondary canals interconnecting the main pore canals, forming a reticulated pore system. This feature has been argued as an adaptation for gas redistribution when some pores become obstructed due to the egg being laid in water-saturated sediments.
Más información:
- Referencia: Sanguino, F., Ortega, F. 2025. Pore system reconstruction and water vapor conductance in titanosaur eggs from the Villalba de la Sierra Fm. (Campanian-Maastrichtian, Central Spain). XXIII Encuentro de Jóvenes Investigadores en Paleontología (EJIP), Buñol, Valencia.