El yacimiento turolense de Ariño, descubierto hace pocos años, ha permitido conocer una interesante fauna del final del Cretácico Inferior (Albiense), una edad para la que el registro europeo era, hasta ahora, muy escaso. Allí se han descrito nuevas especies, entre ellas varios taxones de cocodrilos, así como los dinosaurios Proa y Europelta. Sin embargo, ninguna información sobre las tortugas de esta localidad había sido publicada. Siendo relativamente común el hallazgo de estos reptiles en otros yacimientos, era de extrañar que en Ariño no aparecieran sus restos. Por fin conocemos algo sobre estas tortugas, y nada menos que mediante la descripción de un nuevo taxón, con importantes repercusiones tanto paleobiogeográficas como sobre la distribución temporal de las tortugas mesozoicas.
Esta información acaba de ser publicada en la revista Cretaceous Research. Concretamente se han analizado tres ejemplares, que conservan tanto elementos del caparazón como del esqueleto apendicular. Todos ellos son atribuidos al nuevo taxón Toremys cassiopeia. El nombre genérico (Toremys) deriva de “Toro”, un animal estrechamente relacionado, en varias leyendas e hipótesis, con el origen del nombre de Teruel. Cassiopeia era la tortuga que aparecía en la novela Momo, capaz de predecir el futuro y que conocía la manera de viajar hasta el lugar donde trabajaba el administrador del tiempo. Esta alusión se debe a que la nueva tortuga de Teruel vivía fuera del rango temporal hasta ahora conocido para los otros representantes de su linaje, de los que se separa en más de 30 millones de años. Además, Cassiopeia es una constelación, y el toro y las estrellas están estrechamente vinculados en varias leyendas sobre el origen de la ciudad de Teruel, habiendo sido integrados en su escudo.
La nueva tortuga es identificada como un miembro de Pleurosternidae (Paracryptodira), un grupo de tortugas de agua dulce, que habitaron tanto en Norteamérica como en Europa. Toremys corresponde al tercer pleurostérnido descrito en la Península Ibérica, donde habitaron las formas del Jurásico Superior de Portugal Selenemys y la de España Riodevemys. Únicamente otros dos pleurostérnidos habían sido hasta ahora descritos en Europa, en la parte más antigua del Cretácico, habiéndose descrito en Gran Bretaña. El hallazgo de este superviviente aporta nuevas pistas sobre cómo eran las tortugas de esa parte tan desconocida del Cretácico.
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Más información:
- Referencia: Adán Pérez-García, Eduardo Espílez, Luis Mampel y Luis Alcalá (2015) A new European Albian turtle that extends the known stratigraphic range of Pleurosternidae (Paracryptodira). Cretaceous Research. doi:10.1016/j.cretres.2015.02.007
- Figuras: Arriba, holotipo de Toremys cassiopeia; Abajo, reconstrucción del caparazón del nuevo taxón.
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