El registro de tortugas fósiles de la Península Ibérica es abundante y diverso, considerando tanto el proveniente de niveles mesozoicos como cenozoicos. El conocimiento sobre los representantes ibéricos de este grupo de reptiles ha mejorado de manera muy significativa mediante los estudios realizados en los últimos años. Así, más de un tercio de las especies de quelonios nominadas a partir de ejemplares de la Península Ibérica han sido descritas durante el siglo XXI, correspondiendo a la mitad de las especies de tortugas definidas en esta región actualmente reconocidas como válidas. Estos recientes estudios también han permitido reconocer linajes hasta entonces inéditos en el registro ibérico, refutar varias atribuciones o la validez de varios taxones, plantear nuevas hipótesis sobre las distribuciones paleobiogeográficas y bioestratigráficas de varios linajes, y aportar nuevos datos sobre sus migraciones a Europa y, más concretamente, a la Península Ibérica. Sin embargo, varias determinaciones antiguas no habían sido, hasta ahora, revisadas, y la validez de varios taxones no había sido evaluada, ni tampoco actualizadas las hipótesis sobre su sistemática considerando los avances realizados en el conocimiento sobre estos linajes en otras regiones europeas.
Toda la información sobre la diversidad de los quelonios ibéricos es recopilada y evaluada en un
nuevo trabajo que acaba de ser publicado. Algunas sinonimias son apoyadas o propuestas, la posición filogenética de varias formas es revisada, y todas las especies definidas en el registro ibérico son figuradas. Veintiocho taxones son reconocidos como válidos. Sin embargo, la validez de otras veinticuatro formas no puede ser apoyada.
La posición geográfica de la Península Ibérica a relación a la de otros continentes (especialmente Norteamérica, Asia y Africa), a lo largo de los últimos ciento cincuenta millones de años, permitió la migración de varios grupos de tortugas, así como el desarrollo de patrones de vicarianza, y de endemismos. Otros factores son también identificados como responsables en los fenómenos de dispersión de varios de estos clados, como es el caso de la presencia de temperaturas globales cálidas, tanto durante periodos del Mesozoico como de Paleógeno, sin las cuales los miembros de Pleurodira y varios de Criptodira probablemente no habrían alcanzado esta región. Teniendo en cuenta estos patrones, la historia evolutiva de las tortugas de la Península Ibérica, desde el Jurásico Superior hasta la actualidad, es, por primera vez, recopilada, evaluada y sintetizada. La paleobiogeografía y la información sobre el origen de cada uno de los linajes reconocidos son considerados, así como sus distribuciones temporales.
- Imágenes (de arriba abajo): Miembros de Pan-Pleurodira, Paracryptodira, Pan-Cryptodira basal y Testudinidae del registro ibérico.
- Referencia: Pérez-García, A. 2017. The Iberian fossil record of turtles: an update. Journal of Iberian Geology.